Cartagena, 08 de marzo de 2017. El ICA, seccional Bolívar, realiza controles sanitarios a los 7.400 animales que serán exportados a Jordania. Siguiendo el protocolo zoosanitario establecido por el país destino, se hacen muestreos, vacunación y examen físico y documental. Terminado este proceso el Instituto certificará que se cumplen todos los requisitos sanitarios exigidos y se iniciará la movilización de los animales por vía marítima.
Funcionarios del ICA toman las muestras para las pruebas de tuberculina, brucelosis bovina con fluorescencia polarizada y vacunación contra fiebre de embarque, IBR y carbón Bacteridiano en la totalidad de los animales. Igualmente, hace una revisión física y se inicia el periodo de cuarentena.
Como parte del control, se realiza la verificación documental, que consta de la revisión de las guías de movilización interna y la vacunación contra fiebre aftosa, así mismo, se verifica que en los predios de origen no se ha presentado ninguna sospecha de enfermedades de control oficial.
Adicional a estos controles, veterinarios del ICA hacen diariamente, exámenes físicos aleatorios a los animales, verificando que no tengas heridas, cojeras, salivación excesiva, ectoparásitos, sospecha de enfermedades vesiculares, entre otras; de presentar algún síntoma inusual, los animales son aislados y se realizan chequeos hasta la hora del embarque donde se determinará si pueden ser exportados.
“El ICA tiene la responsabilidad de certificar que los animales que serán exportados cumplen con los requisitos establecidos, evitando la salida de enfermedades nativas que pueden ser exóticas para el país de destino. Estos controles se hacen durante un periodo de 40 días”, afirmó Cristóbal Monterrosa, gerente seccional del ICA en Bolívar.
De igual manera, al buque que transportará estos animales se le realiza una pre-inspección en la que se revisa la disposición de agua y comida para los animales, que los corrales no tengan aristas que puedan generar heridas durante el viaje, así como la ventilación e iluminación adecuadas, aspectos que garantizan el bienestar de los animales durante la movilización.
A su llegada, estos animales pasan por un periodo de aislamiento para iniciar el proceso de adaptación a la nueva alimentación y recuperación de peso, que puede durar entre 15 y 30 días. Los bovinos machos que se están exportando, tienen entre 18 y 24 meses.
“El país de destino reconoce al Instituto como autoridad sanitaria, por lo cual es nuestra responsabilidad realizar esta cuarentena de manera eficiente y velar por que se cumpla a cabalidad con cada uno de los requisitos establecidos en el protocolo sanitario de exportación”, concluyó Monterrosa.
