Valle del Cauca, 22 de septiembre de 2025. Con el propósito de proteger la sanidad de los cultivos de algodón en el Valle del Cauca, el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) viene realizando jornadas de monitoreo en los municipios de Roldanillo y Palmira. La actividad se enfoca principalmente en la detección del
picudo algodonero (
Anthonomus grandis), una de las plagas más dañinas de este cultivo, y en la verificación del cumplimiento de la normativa establecida para la temporada 2025.
Las jornadas de
prevención, vigilancia y control, liderada por los profesionales del ICA, realizaron las labores en los lugares de producción, de los municipios señalados anteriormente. Para ello revisaron las trampas instaladas en los cultivos y recolectaron los individuos de picudos capturados, que serán procesados en el
Laboratorio de Diagnóstico Fitosanitario. Estos análisis permiten confirmar la identidad de la plaga y orientar un
manejo integrado, es decir, un conjunto de prácticas combinadas para prevenir y reducir el daño en el sistema de producción.
Durante las actividades de vigilancia se continúa con la socialización a productores sobre las medidas establecidas en la
Resolución No. 00001328 de 2025, que regula el registro de agricultores, la venta y uso de semilla certificada, las fechas de siembra y resiembra, la destrucción de socas (residuos de la cosecha) y los periodos de veda necesarios para romper el ciclo del insecto.
De acuerdo con la información recolectada, en el departamento del Valle del Cauca se sembraron
169,3 hectáreas de algodón, correspondientes a
12 productores de los municipios visitados. Atendiendo las solicitudes de los agricultores, el ICA modificó y amplió las fechas de siembra mediante la
Resolución No. 00003836 del 11 de abril de 2025, con el fin de dar mayor flexibilidad a los productores y evitar afectaciones en la programación agrícola, debido a las condiciones climáticas en la región.
El seguimiento realizado busca
conocer el comportamiento de la plaga y así buscar estrategias de control y evitar la afectación en la economía local. Con estas acciones, el ICA reafirma su compromiso de trabajar de manera articulada con los productores para prevenir, controlar y erradicar plagas, contribuyendo al desarrollo de un sector agrícola más
competitivo, sostenible y rentable.