24 de noviembre de 2017
El ICA mantiene vigilancia activa para enfermedades de tipo aviar en predios pecuarios del Putumayo
- La influenza aviar es una enfermedad viral que adquieren las aves de corral, es altamente contagiosa y les provoca mortalidad.
Puerto Asís, 24 de noviembre de 2017. Con el objetivo de hacer vigilancia epidemiológica y dar soporte al mantenimiento del estatus sanitario de país libre de Influenza aviar, el ICA visitó predios pecuarios que se dedican a la producción avícola, en los municipios de Orito y Valle del Guamuéz en Putumayo.
Funcionarios del ICA revisaron un inventario de 50 aves para tomar muestras de cada una, y mediante análisis de laboratorio posteriores, comprobar la ausencia o presencia del virus de la Influencia aviar y Newcastle, y a su vez, detectar de manera temprana cualquier síntoma relacionado con estas enfermedades. En este caso, las aves de combate tienen prioridad en la revisión, ya que son las más vulnerables para adquirir el virus.
Así mismo, el ICA revisó las aves, en busca de cualquier cuadro clínico respiratorio, neurológico o digestivo, que pudiera presentarse en estas, ya que uno de los principales objetivos del Instituto es dar cumplimiento a la Resolución 1610 de 2010, en la cual Colombia se auto declara como país libre de la Influenza aviar, así mismo aplica para la enfermedad conocida como Newcastle.
El gerente seccional del ICA en el Putumayo, Jehann Favio Muñoz, recordó a los productores avícolas, la importancia de notificar a tiempo ante la Entidad, cualquier signo compatible con enfermedades de tipo aviar que se presente en los predios.
“Cualquier foco sospechoso en los predios de producción avícola, es objeto de muestreo y análisis de laboratorio por parte del ICA, para descartar la enfermedad o en caso de presencia, aplicar las acciones sanitarias encaminadas al control y erradicación de la misma. Por esta razón, las visitas de inspección que el Instituto hace a los predios es de vital importancia”, manifestó el gerente seccional.
La Influenza aviar se caracteriza por causar lagrimeo ocular excesivo en las aves, les eriza las plumas y presentan sinusitis y edemas en la cabeza, entre otros síntomas que, al igual que la enfermedad de Newcastle, genera mortalidad en estos animales, pérdidas económicas y bajas en la producción.
Algunas de las recomendaciones que el ICA establece para hacer uso de las buenas prácticas en la producción avícola a nivel nacional, consisten en que:
- Todas las granjas dedicadas a la crianza de aves para consumo humano deben estar registradas ante la autoridad competente.
- Se debe garantizar, con anticipación la disposición de los galpones e instalaciones para la recepción de las aves, con el fin de permitir la ejecución, a tiempo, de acciones correctivas.
- El perímetro debe estar claramente delimitado y protegido.
- Deben evitarse salientes afiladas y equipamientos que puedan causar daño a las aves.
- Durante la crianza de las aves se debe controlar la humedad, la circulación y calidad del aire en la superficie de la cama y todo el galpón.
- Administrar a las aves, dietas y esquemas de alimentación que aseguren el adecuado consumo de nutrientes, dependiendo de su edad y condición productiva, contribuyendo a la salud y bienestar.
- Previo al ingreso, la ducha sanitaria debe ser obligatoria para el personal que labora en granjas, reproductores y plantas de incubación.