Intensifican medidas para el control de la mosca de la piña en Santander

Bucaramanga, 18 de febrero de 2019. El Instituto Colombiano Agropecuario, ICA, llevó a cabo actividades de capacitación sobre el manejo integrado y el control de la mosca Melanoloma Viatrix Hendel, más conocida como la mosca de la piña, a los productores y técnicos de los municipios de Lebrija y Girón, Santander, con el objeto de mantener el estatus fitosanitario en esta zona del país.

Durante un taller, dirigido a los agricultores de la región, el ICA suministró información técnica sobre este insecto, las medidas de identificación y los niveles de afectación en los cultivos de piña, en busca de fomentar estrategias que aporten a una producción de frutas sanas y de calidad.

Santander es el departamento con mayor producción de piña en el país, por lo que, mediante un trabajo articulado entre la institucionalidad y los productores, se intensifican las medidas de control y prevención ante las implicaciones que pueda causar el insecto, y así evitar que se disperse a otros sitios libres de esta plaga. Este es un insecto que puede convertirse en plaga en áreas donde no se realice un buen manejo del cultivo.

“Los productos afectados presentan diversos síntomas, entre los que se destacan la coloración exterior no uniforme, presentando manchas de coloraciones verdes- rojizas-naranja. Al interior del fruto las larvas provocan que la pulpa se pudra, la cual se torna de color marrón, y en ocasiones pueden deformar ligeramente los frutos”, comentó el gerente seccional ICA, en Santander, José Atilano Rincón.

La mosca de la piña se reconoce por su cuerpo de coloración negro ornamentado, con fuertes setas en el tórax y abdomen que le da una apariencia aterciopelada. Las alas alargadas y angostas. La aparición de este insecto fue reportada por primera vez en 1991 en Cundinamarca, y posteriormente se extendió a los departamentos de Santander, Antioquia y Norte de Santander.

Los municipios de Santander más productores de piña son Lebrija con 1.300 hectáreas sembradas, y girón con 600 hectáreas. Le siguen con menor área los municipios de Río Negro, Sabana de Torres y Los Santos.

El Instituto no descuida su trabajo por la sanidad y la inocuidad de esta tradicional fruta santandereana, realizando visitas de vigilancia y control en los predios donde se produce la piña.